Después de aumentar los peajes hasta un 56% para compensar a la familia Benetton y al dueño del Real Madrid, de la explicada estafa al Estado argentino por parte de Macri, de otros varios aumentos tarifarios y de muchas otras maniobras (Autopistas del Sol), llega la quintaescencia del macrismo: subordinar el Estado a las preorrogativas empresariales y a los usuarios y consumidores a las lógicas de las empresas. Neoliberalismo puro al ataque.
La novedad (bien velada por el gobierno PRO y sus usinas mediáticas, Clarín y La Nación) dice que las empresas concesionarias de las autopistas ya no tienen la obligación de levantar las barreras de los peajes cada vez que se congestione el paso con colas de hasta 150 metros de vehículos o hasta tres minutos de espera.
La noticia apareció en diferentes carteles pegados en los peajes, en donde se hacía referencia a lo establecido en el nuevo acuerdo firmado con el Gobierno, que ya no contempla esa posibilidad.
La novedad (bien velada por el gobierno PRO y sus usinas mediáticas, Clarín y La Nación) dice que las empresas concesionarias de las autopistas ya no tienen la obligación de levantar las barreras de los peajes cada vez que se congestione el paso con colas de hasta 150 metros de vehículos o hasta tres minutos de espera.
La noticia apareció en diferentes carteles pegados en los peajes, en donde se hacía referencia a lo establecido en el nuevo acuerdo firmado con el Gobierno, que ya no contempla esa posibilidad.
Si bien se conoció estos días, la noticia no es nueva. El cambio de normativa entro en vigencia el 23 de enero (2019), según lo dispuesto en el nuevo acuerdo de renegociación de las concesiones.
"A partir del 23 de enero entra en vigencia el punto 4.4 del Acuerdo Integral de Renegociación, a partir del cual quedan dadas las condiciones para dejar sin efecto la obligación de levantamiento de las barreras por tiempos de espera en las estaciones de peaje", dicen los carteles pegados en varios peajes.
Según el acuerdo, la sanción de levantar la barrera cuando hay embotellamiento ya no sería necesaria por la implementación del sistema de pago de TelePASO, que agilizaría el paso por las cabinas de peaje.
Cola de mas de 1 km telepeaje mercado central. Con la nueva reglamentación no abren las barreras. Que nos pasa como sociedad que mansamente nos entregamos a que nos pasen por arriba pic.twitter.com/DH2DLBnM5l— eduardo detoma (@edetoma1) 22 de febrero de 2019
La normativa anterior establecía que desde que un vehículo se paraba en la fila para pagar el peaje no podía transcurrir más de dos minutos para carriles exclusivos de automóviles y tres para vías de transporte mixto. También aclaraba que el “número máximo de vehículos detenidos en una fila para el pago del peaje no podrá exceder, en ningún caso, los quince vehículos”.
El mes pasado (Enero 19), los peajes del Acceso Oeste y la Panamericana aumentaron un 33% en promedio, aunque por las modificaciones introducidas en las franjas horarias en algunos casos las subas llegaron al 89,2%.
Hermoso. #HechaLaLey #ArgentinaEsGenial #LosDerechosDelUsuarioTeLosDebo @defensoriaPBA pic.twitter.com/iFc7Pd9VO3— Derecho enZapatillas (@dzapatillas) 18 de febrero de 2019
En las autopistas porteñas los peajes subieron en enero hasta 34,9% para los autos livianos y 66% en el caso de las motocicletas. Con las nuevas tarifas de la 25 de Mayo y Perito Moreno los automóviles pasaron a pagar 60 pesos en horario no pico y 85 pesos en las horas de mayor congestión.
Las tres autopistas pagas en jurisdicción porteña son la 25 de Mayo, la Perito Moreno y la Illia. En promedio, cada día pagan peaje 310.761 vehículos, la mitad con el método electrónico.
La Panamericana es la autopista de acceso a la Ciudad con mayor cantidad de vehículos: la transitan más de 369.914 por día. Mientras que el Acceso Oeste tiene un caudal promedio de 315.443 vehículos diarios.
La discusión sobre el criterio de cobrar peajes en las rutas o autopistas, es decir, blanquear el cobro de millones diariamente por el uso de un camino ya hecho y pagado puede discutirse largamente casi como el sentido de pagar la provisión de cable e internet (plagados de publicidad). Este gobierno PRO no sólo se aleja de la discusión sino que acomoda a los usuarios y clientes a las necesidades y comodidades de las empresas que, además, no cesan de incrementar los valores tarifarios en un uso monopólico de las rutas.
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