Mauricio Macri admite en su declaración jurada ser dueño de los mayores emprendimientos inmobiliarios del sur de la ciudad. Aquellos para los que la legislatura votó eximición de impuesto a los ingresos brutos y de ABL.
El Fideicomiso Caminito, que figura en la Declaración Jurada del presidente Mauricio Macri, es el propietario de uno de los mayores emprendimientos inmobiliarios de la zona sur de la Ciudad de Buenos Aires: la remodelación de la ex fábrica de Alpargatas sobre la calle Patricios al 1000 y su transformación en Molina Ciudad, un edificio de lofts y estudios de diseño y arte.
El emprendimiento inmobiliario del Presidente se encuentra en el centro de las principales obras de desarrollo que su gobierno llevó a cabo cuando estuvo a cargo del ejecutivo de la Ciudad de Buenos Aires y en un área en que se votaron privilegios y exenciones impositivas a lo largo de los ochos años en que gestionó.
La empresa se acogió a los beneficios impositivos de la ley de creación del Distrito del Arte, impulsada por el gobierno de Macri unos meses después de que el jefe de gobierno conformara el Fideicomiso y emprendieran las obras en el lugar. No paga, por lo tanto, ingresos brutos ni ABL.
En el año 2012, el edificio que ahora se sabe que es del jefe de gobierno fue sede de la exposición de Casa FOA, impulsada por el Gobierno de la Ciudad para la promoción de la zona sur. Y el mismo jefe de gobierno estuvo en el lugar entregando premios a los emprendedores. Un enorme cartel en la puerta aclara que la comercialización está a cargo de Achával-Cornejo. El presidente de esta inmobiliaria es Iván Achával, íntimo amigo de Mauricio Macri y uno los pocos con quienes compartió su cumpleaños en febrero pasado junto a su esposa Juiana y su hija Antonia.
Macri declara como parte de su patrimonio su participación en Caminito, creado para la “construcción, reforma y reparación de edificios residenciales” sin mencionar que el fideicomiso fue creado para el proyecto Alpargatas/Molina. Al final del período, valúa su participación en 19.613.505,00. Un monto absurdo para un emprendimiento cuyo capital es un edificio de 65.000 metros cuadrados.
En la venta de las propiedades, se recuerda que “las mejoras en infraestructura y seguridad atrajeron a empresas que instalaron sus oficinas corporativas, así como también una creciente oferta comercial a lo largo de Avenida Patricios. La creación del Distrito de las Artes le dará a este barrio histórico de la Ciudad su propia temática, con la radicación de más talleres, galerías y artistas”. El complejo consta de 360 lofts de entre 50 y 160 m2, con unidades en dúplex con terrazas propias en los pisos superiores, que funcionan como viviendas y oficinas. Además en la planta baja, el Grand Atrium Central, totalmente equipado, es un espacio abierto a la comunidad, con locales orientados al arte, para renta del consorcio. De este modo goza de las exenciones previstas por la ley 4.353 de distrito de las artes.
El diario La Nación lo describía así a poco de inaugurarse: “En Molina Ciudad, todo impresiona por sus dimensiones. El emprendimiento ocupa toda una manzana y de sus 65.000m2, el 30% son espacios comunes. El gran lobby tiene 1.600m2 y doble altura, la piscina tiene 32 metros de largo. Los lofts, con superficies que van de los 60 a los 230m2, tienen 4 metros de altura y sorprenden por su espacialidad. Todas las unidades tienen balcón y hay también lofts con terrazas y en dúplex”.
El proyecto lo llevó adelante Fernando Baremboin, un ex gerente de IRSA que formó su propia desarrolladora, Ges S.A. Ges comparte dirección, French 2699 Piso 1, con Fideicomiso Caminito y en las notas de prensa aparece como la propietaria del edificio de Alpargatas y todo el emprendimiento. Sin embargo, quienes a partir del 2011 compraron cuotas del fideicomiso, saben que lo hicieron con Caminito.
Así consta por ejemplo en el acta de Lanchas del Este, cuando le compra el 3,5% de las acciones al “Fideicomiso Caminito, creado para el desarrollo y remodelación del edificio Ex Alpargatas”.
Una de las primeras tareas emprendidas por el gobierno de Macri fue la remodelación de la Avenida Patricios. Después de tres años de obras la inauguró con fiesta junto a su ministro Daniel Chaín. La remodelación incluyó la puesta en el mismo nivel de lo que históricamente fueron los cajones y escalones de las veredas, asfalto nuevo, luminarias y mobiliario urbano.
Pero el paisajismo no fue lo único que hizo el jefe de gobierno para promover su emprendimiento. En diciembre de 2012 la legislatura debatió y votó el proyecto de creación del Distrito de las Artes. El proyecto original enviado por el poder ejecutivo a través del ministro Fernando Cabrera contemplaba un sinnúmero de exenciones impositivas y ventajas para quienes “realicen inversiones a través de la compra o locación de inmuebles en el Distrito de las Artes, realicen ampliaciones, reformas o refacciones” o simplemente inviertan en emprendimientos que hagan algo de todo esto.
El proyecto estaba claramente destino a desarrolladores inmobiliarios, sin que se supiera entonces que el principal emprendedor de esa zona era el jefe de gobierno Mauricio Macri. Molina Ciudad precisamente ofrece “amplios espacios”para ser usados como estudio de arte.
Después de meses de debate en la legislatura y sucesivas modificaciones se aprobó bajo la forma de impulso al arte joven, con la participación del ministerio de cultura. Sin embargo, los legisladores que lo apoyamos entonces con este criterio no teníamos conocimiento de que el principal emprendedor inmobiliario de la zona y que quería usarlo en su beneficio era el propio jefe de gobierno.
Por esa ley, las empresas promocionadas están eximidas de pagar el impuesto a ingresos brutos por diez años. Pero, cuando se trata de lugares patrimoniales, como en el caso del viejo edificio de Alpargatas, pueden usar hasta el 25 % de la inversión realizada para remodelar el lugar como pago a cuenta de futuros impuestos.
El porcentaje indicado en el párrafo anterior se eleva al treinta y cinco por ciento (35%) si la inversión se destina a la puesta en valor de inmuebles catalogados con protección patrimonial conforme a la Ley 449 y modificatorias, o a la puesta en valor de inmuebles que formen parte del Patrimonio Cultural de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires conforme la Ley 1227. Si dichos porcentajes resultasen superiores al monto del impuesto a pagar, la diferencia genera créditos a favor que pueden ser compensados durante los cinco (5) ejercicios fiscales inmediatos siguientes, o dentro de los diez (10) años de entrada en vigencia de la presente Ley, lo que ocurra primero. (art. 11)
Están eximidos además del pago de ABL y tienen líneas especiales de crédito.En este esquema, es muy probable que la ciudad Molina no pague impuesto de ingresos brutos hasta una nueva generación de la familia Macri.
Investigación de Gabriela Cerruti.
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