El gobierno PRO volvió a mentir y volvieron a aumentar las naftas.


YPF aumentó los precios de los combustibles, aplicando un 5% en el litro de nafta super y gasoil, y un 8% en los productos premium. La nafta super pasó de $26,5 a $27,83 y la de mayor calidad de $30,74 a $33,20, mientras el gasoil fue desde $23,05 a $ 24,20, y el premium de $26,86 a $29,01.

De este modo quedó definitivamente caído el acuerdo de precios que impulsó el ex ministro Juan José Aranguren en mayo y junio (2018) y que preveía un incremento del 3% para este mes.

Se presume que esta decisión de YPF se tomó tras el encuentro que mantuvo el ministro Nicolás Dujovne con el titular de la petrolera, Miguel Gutiérrez, el 28.06.2018. Se entiende además que es un intento por no dar marcha atrás con la liberación de precios para no desalentar inversiones y no llevar a una situación insostenible el valor de la acción de YPF, que el viernes perforó el piso de u$s14 y terminó en u$s13,58 en Nueva York.

Sin embargo, el aumento puesto en marcha implica desde ya más de un punto en el índice de precios al consumidor y la inversión dependerá no solo de los valores al público. Según la misma fuente de YPF este es un momento de transición en camino a la plena normalización de los precios para alinearlos con los mercados internacionales. Sí, como lo lee. Este gobierno aún pretende aumentar aún más el precio de los combustibles, aún comprometiéndose a no superar un 32% anual de inflación ante el FMI.

Litro nafta Súper (diciembre 2015) - $ 13,01

Litro nafta Súper (junio 2018)         - $ 27,83

Pero el panorama es aún más oscuro. La decisión de YPF, y en última instancia del propio Gobierno, genera incomodidades en las otras petroleras. En las refinadoras porque ya no hay horizonte de precios como en los acuerdos que propiciaba Aranguren. No hay certezas de cuándo se recompondrán los valores en los surtidores trasladando toda la incidencia de la devaluación y del avance en el precio del petróleo. Para algunos, ese desfasaje ya supera el 30% al que habrá que restarle el aumento que se practique ahora, aunque falta ver en qué punto se estabiliza el tipo de cambio y qué sucede en el mercado internacional.

Para los consumidores está claro que va a haber más aumentos en los próximos meses y que su envergadura dependerá de la situación económica y también de las presiones que se intensifican sobre el Gobierno.

Veinticuatro horas después de que YPF aumentara sus naftas y el gasoil, la petrolera Shell siguió sus pasos y anunció desde hoy (03.06.2018) un incremento del 9% en su nafta súper y de entre 11 y 12% en la nafta y el diesel premium. De esta manera, el litro de súper pasa de $27,08 a $29,52; la premium V-Power nafta de $31,48 a $34,99 y la V-Power Diesel de $27,66 a $30,98 el litro. 

Fuentes de la compañía justificaron el incremento por la devaluación y la incidencia de otros costos sobre el valor final de los combustibles, como la suba de los biocombustibles. Destacaron además que son la única empresa del sector que no está integrada, es decir, que sólo refina y no produce petróleo. "El último aumento que habíamos aplicado fue el 2 de junio, con un dólar que estaba a $25,40 mientras que ahora está en unos $28,80. En un mes tuvimos una devaluación de más del 13 por ciento", dijeron.

Las fuentes anticiparon que debería haber en el futuro otros incrementos en los combustibles para cerrar la ecuación económica. "Hasta hoy veníamos un 30% abajo en el acumulado del año; con este aumento de esta noche apenas recuperaremos un tercio y seguiremos 20% abajo", afirmaron o amenazaron.

Chocaron la calesita.

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