Trabajadores de la construcción de la central atómica Atucha III enrolados en la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) bloquearon hoy (21.03.2016) la rotonda de ingreso a la ciudad de Zárate, donde se encuentra la planta, en protesta por inminentes despidos y el definitivo desguace del plan nuclear argentino.
La situación es compleja en Zárate: 2500 nuevos despidos siguen a la renuncia completa del directorio de Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NASA), operadora de Atucha mientras los trabajadores cortan las rutas de acceso a Zárate.
La protesta se extendió desde las 9 y hasta las 15, sobre la ruta 14, Zárate, donde está proyectada la construcción de la planta Atucha III.
Ariel Puebla (secretario adjunto de la UOCRA Zárate) denunció que 1.200 trabajadores afectados se quedarán sin empleo el 31 de marzo puesto que las empresas del sector ya anticiparon la medida por la decisión política del Gobierno de no continuar con la obras, que en la planta de Atucha III los despidos llegarán a 2.500 trabajadores, sumando los restantes gremios y que en la región van a superar a las 3.000 personas "porque se están por paralizar las obras de las rutas 6, 8 y 9 y de la reparación de vías de la línea Mitre a Rosario".
El método se repite, como en todas las áreas estatales y/o de infraestructura: silencio e intriga: "hasta ahora no hay ninguna respuesta ni de las autoridades nacionales ni de las provinciales… los funcionarios argumentan que no va a haber despidos pero los 2.500 contratos vencen el 31 de marzo próximo y no hay seguridad de que sean renovados".
"Una comisión de diputados y senadores bonaerense en representación de todos los partidos realizó gestiones con funcionarios del ministerio de Energía, porque Aranguren no nos quiso recibir y tampoco nos dieron una solución".
“Las cinco empresas adjudicatarias de la obra de la central nuclear anunciaron el cese de los contratos y solo prometieron retener a 400 trabajadores, pagándoles un sueldo básico sin importar la categoría de convenio, lo cual se parece más a una extorsión”, explicó Puebla.
La política macrista no necesita de interpretaciones. Los 600 despidos en Atucha del mes de febrero (que generaron el estado de asamblea permanente) se conjugan con el dato filtrado desde Casa Rosada el mismo mes: el freno a la construcción de las represas Néstor Kirchner (Atucha II) y Jorge Cepernic (Atucha III), adjudicadas a un consorcio encabezado por Electroingeniería, la china Gezhouba Group Corporation e Hidrocuyo.
Electroingeniería controla a la empresa Vialco SA, que desde noviembre no recibe fondos comprometidos del Gobierno nacional y tuvo que discontinuar el pago de quincenas a trabajadores de la Central Nuclear Néstor Carlos Kirchner.
Sabemos que la Argentina neoliberal que muestra a Macri como cabeza visible quedó inmersa bajo la sombra estadounidense en su guerra (comercial) contra China. La maniobra, además de reducir el Estado y abandonar el plan nuclear argentino apunta en dirección a China. No en vano, la semana pasada Prefectura hundió el buque pesquero chino Lu Yan Yuan Yu 010 en las costas de Chubut y alarmó a la embajada China.
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